Científicos clonan cerdos para realizar trasplantes de órganos a humanos

El 10 de agosto, la revista Science publicó el estudio “Inactivation of porcine endogenous retrovirus in pigs using CRISPR-Cas9”  realizado por 22 científicos estadounidenses, daneses y chinos el que plasma los resultados de la utilización de la técnica de edición de código genético CRISPR-Cas9 para la clonación de cerdos sin retrovirus porcino endógeno. Lo anterior, con el propósito de producir cerdos con órganos más seguros para el trasplante a humanos.

Desde un enfoque científico, este estudio llama la atención porque abre la posibilidad de los trasplantes interespecie, asunto de gran relevancia si consideramos que sólo en Chile 1.876 pacientes esperaban un trasplante a junio de 2017, según cifras de la Corporación del Trasplante.

La comunidad  científica investiga desde la década de los ‘90 la posibilidad del mencionado trasplante interespecie debido a la compatibilidad entre los humanos y los cerdos el cual, hasta ahora, estaba sujeto al riesgo de trasmisión del retrovirus principalmente.

Aunque el trabajo de los autores del artículo evidencia importantes avances científicos respecto a la clonación y a la genética, también llama la atención en el nivel ético: ¿es apropiado utilizar animales en este tipo de experimentos que buscan mejorar la salud de los humanos?

De acuerdo al New York Times : “Los científicos en pos de este objetivo argumentan que solo se criarían unos cuantos miles de cerdos para este fin, lo que representa un porcentaje muy pequeño del total de los animales sacrificados, y que su finalidad sería salvar vidas humanas y no ser comidos; además de que los animales estarían anestesiados y se les daría una muerte sin crueldad”.

Entonces, la primera pregunta para quienes siguen dietas basadas en plantas y/o se preocupan por el bienestar animal es si corresponde que los animales no humanos sean usados para fines que podríamos llamar altruistas porque serían menos que la cantidad de animales que se destinan a la industria alimentaria y su muerte sería más piadosa (en Chile la producción de carne de cerdo es la segunda del mercado: cuenta con 237 mil reproductoras y llega a 584 mil toneladas).

En segundo lugar, debemos reflexionar sobre si es viable utilizar animales para ciertos tipos de experimentación científica – aquella que pretende beneficiar la salud versus las relacionadas a la industria de la belleza, por ejemplo.

¿Qué opinan ustedes zanahorias?