English
Ayer recibí una súper veggie noticia “tomé una decisión respecto a mi alimentación, ahora soy vegetariana” me dijo mi hermana menor y mi corazón de zanahoria no pudo más de alegría <3 .
En mi hogar, mi pareja y yo somos vegetarianos. Pero en la casa de mis papás el cuento es otro, por eso que escuchar que ahora un nuevo integrante de la familia optó por llevar una diera libre de crueldad me hizo muy feliz, sobre todo por sus argumentos.
“Hace pocos días fue el festival en China donde matan perros a destajos y varios amigos postearon “¡malditos, pobres perritos, qué les pasa!,” y me pregunté ¿si ellos comen vacas, pollos, cerdos, que también fueron matados cruelmente por qué reclaman por los perros?. Claro, en nuestra cultura, animales como perros y gatos son “mascotas”, hay otra relación con ellos, pero en China no, los perros no son parte de la familia, es decir, para ellos son un animal más como las vacas que acá se consumen como si nada”.
Bajo ese análisis tan simple y claro mi hermana optó por dejar de comer animales, así como no comemos perros porque consideramos su matanza como un acto macabro, ella concluyó lo básico: el resto de los animales no pueden ser discriminados sólo porque culturalmente no los familiarizamos como seres sintientes.
Como anécdota quiero contarles que mi hermana, la misma que hace días decidió dejar de comer animales, años atrás me dijo “estás mal de la cabeza” cuando rechacé un plato con carne.
A veces juzgamos sólo porque culturalmente nos han acostumbrado a creer que ciertas costumbres son correctas y otras no, pero sólo vasta disponer nuestra mente para observar el escenario completo y sacar nuestras propias conclusiones. Los invito a reflexionar al respecto <3
